57-NUESTRO PERDIDO PATRIMONIO ARTÍSTICO (1ª parte)
Puesto que el día anterior traté del desaparecido Palacio de los Condes de Gabia, hoy aprovecho para poner parte de un trabajo que sobre el mismo tema publiqué en la revista Ibiut, nº 34 de febrero de 1988.
Debido a la gran riqueza artística y monumental que atesora nuestra ciudad, se están llevando a cabo los trámites burocráticos para que la UNESCO declare a Úbeda Patrimonio de la Humanidad-
Y es que si Úbeda tiene valores para ganar ese galardón, ¡qué no sería de ella si no hubiese perdido tanto como le falta! Pues recordemos que lo primero que perdió fue el conjunto de edificios militares y civiles del Alcázar, el cual debido a las sangrientas luchas intestinas que llevaron a cabo por su posesión y mando los Aranda y Trapera primero, y los Cueva y Molina después, hizo que Isabel “la Católica” decretara su demolición allá por el año 1507, y fue una lástima porque por la extensión que pillaba debió ser imponente. Luego en el 1803 desapareció la iglesia parroquial de San Juan Bautista, que estaba situada más allá de San Millán, debajo de la Redonda de Miradores.
Después los siguientes daños importantes a nuestro patrimonio fueron los ocasionados por la invasión de los franceses pues en su huida destrozaron los conventos de San Francisco, San Antonio, ermitas de San Lázaro y San Marcos, el Hospital de Santiago. Pero cuando nuestro patrimonio artístico empezó a ser gravemente mutilado fue a partir de 1836, pues debido a la fatídica ley de Mendizábal fueron exclaustrados los conventos y vendidos al mejor postor, cuyos compradores los utilizaron para diversos usos y llevados la mayoría a su desaparición total.
Así tenemos el de San Antonio del que no queda nada más que el minado del agua, pues sus piedras fueron utilizadas por para la construcción de la carretera de Baeza. El de San Nicasio que estaba situado frente al Hospital de Santiago y cuyas piedras sirvieron para construir la Plaza de Toros. El de la Coronada, cuyo solar da cobijo a la actual Plaza de Abastos. El de la Merced cuyo solar lo ocupan algunas casas y la Alfarería Góngora, sólo queda de él la puerta de entrada con el escudo de la Orden y la virgen titular que la coronaba. El de los Jesuitas situado en la calle Compañía convertido ahora en un gran comercio y otras viviendas. El de San Andrés cuyo solar lo ocupa el Instituto de Bachillerato Francisco de los Cobos y del que se conserva una puerta monumental en la calle San Juan de la Cruz y algunas dependencias en las casas de la Cuesta del Rosal. El de San Francisco en la plaza de su nombre del que sólo queda dos puertas y la deteriorada nave de su iglesia. El convento de San Juan de Dios situado en el Claro Alto, actual Cronista Cazaban del que sólo queda el Cristo de los Toreros situado ahora en una capilla de la Iglesia de Santa María. El Hospital de Pero Almindez Chirino situado en la calle San Jorge y del que últimamente se ha descubierto la monumental puerta de entrada a la iglesia.
En 1843 desaparece la iglesia parroquial de San Juan Evangelista de la que sólo queda como testigo parte del ábside entre las huertas. También desaparecieron una decena de ermitas. Este mismo año desaparece la iglesia parroquial de Santo Tomás Canturiense. Y por esas mismas fechas es cuando empieza la destrucción de nuestras murallas y la desaparición de trece o más puertas de las mismas bajo el pretexto de “estorbar para el tráfico rodado”. Las muralla gran parte de ella fue ocultada por construirse edificios delante de la misma, pero la de los Miradores se destruyó porque como el permiso para edificar se les concedió a personas humildes estos tuvieron la ocurrencia de arrancar las piedra de la muralla para con ellas levantar la fachada de sus casas, lo que originó que por algunos lados la parte de atrás quedara tan debilitada que hubo desprendimientos y hasta en un sitio las piedras desprendidas mataron a una señora.
Las fotos que aporto van puestas en el orden inverso en que he nombrado los edificios siniestrados; Alcázar, Plaza de Toros, Paseo de la Coronada, Convento de la Merced, Convento de los Jesuitas. Convento de San Andrés, Convento de San Francisco, Cristo de los Toreros, Hospital de Pero Almindez, Iglesia de Santo Tomás, Ábside de San Juan Evangelista y murallas de la Redonda de los Miradores.
Juan Gabriel Barranco Delgado
Úbeda, Reino de Jaén a 22 de agosto del año 2019
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